Luego de confirmar lo puesto en el post anterior (que soy un borracho común y corriente), los estragos duraron buena parte del tercer día. Por lo visto, creo que el almuerzo del viernes me cayó un poco pesado y la combinación con el alcohol ingerido dio como resultado efectos sumamente tóxicos... será acaso que mi hasta hace un año recio estómago se ha acostumbrado a lo sobrio de la comida chilena? Quien sabe.
Sigo dándome cuenta de algunas cosas, que también podrían corresponder al día 3 y al 4:
1. En inglés existe un término llamado "burning bridges", que se refiere a dejar de lado tus lazos con tu pasado (especialmente en el término laboral o sentimental). Nunca es bueno quemar esos puentes.
2. Mi primer ex-jefe está causando trastornos psicológicos en sus nuevos subordinados: de tres reuniones en tres días todos se quejaron amargamente.
3. El trago en las reuniones ha ido evolucionando: hemos pasado de la oferta Pampero (Pa'l Perro) a Jack Daniel's (pero aun queda pendiente el Absolut Level).
4. La música de los 90s es demasiado chévere.
5. Viajar en combi es una experiencia casi surrealista (aunque por lo menos viajas sentado).
6. Confesar tus planes futuros puede ser duro a veces.
domingo, 27 de mayo de 2007
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
No hay comentarios:
Publicar un comentario